Eres como el chocolate negro. Ese oscuro tan caro que sólo venden en algunos sitios. Ese que tiene un sabor duro con un puntito de amargura que lo hace tan interesante. Así eres tú... Como un dulce caprichoso al que le gusta retar a mi boca.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario