Mostrando entradas con la etiqueta contigo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta contigo. Mostrar todas las entradas
lunes, 28 de septiembre de 2015
Ahora ya que no estás
No voy a echarte de menos. Te querré porque te quiero y te irás sin más, pero no voy a echarte de menos. Me faltarán tus ojos y tal vez tu sonrisa. Todo lo que tú eres se irá contigo, también tú, y los saludos a traición por las mañanas, también tú aunque yo no quiera que te vayas ni quiera echarte de menos; aunque me peses y me faltes, igual que ahora que cuando estás ya noto que te has ido.
miércoles, 5 de agosto de 2015
Yo no quiero besos
Yo no quiero besos. Los besos son cortos. Yo quiero una docena de amaneceres y medio millón de "rozar tu cuerpo sin querer bajo las sábanas". No me basta con besarte, amarnos un poco, o mucho, y después dejarte marchar. Tus labios en los míos están bien, supongo, yo creo que se gustan, y pienso que nosotros también disfrutamos de ellos. Contigo y unas cuantas caricias de esas de las que te pillan desprevenido se estaría bien.
Yo quiero un beso que sepa a "llevo todo el día esperándote". Tú junto a mí, quiero que perdamos el tiempo haciéndonos de todo sin que hagamos nada. Yo no quiero besos de "cuánto me gustas". Quiero besos de "amor, cielo, princesa, moriría ahora mismo contigo".
Yo quiero un beso que sepa a "llevo todo el día esperándote". Tú junto a mí, quiero que perdamos el tiempo haciéndonos de todo sin que hagamos nada. Yo no quiero besos de "cuánto me gustas". Quiero besos de "amor, cielo, princesa, moriría ahora mismo contigo".
jueves, 30 de julio de 2015
Uno de mil
Acabo
de escribir uno de esos relatos de los que podría escribir mil, de esos en los
que escribo: “Princesa, sabes a estrellas regadas de miel.” De esos en los que
intento hacer un mundo de cada palabra, o de encerrar un mundo en tres sílabas,
escribiendo cosas del tipo: “A mí me gusta cuando te dejas caer junto a mí y
parece que el universo se detiene para nosotros.” Uno de esos textos estúpidos
que tú ya tomas como una más de mis ocurrencias, igual que las flores sienten
caer sobre ellas la lluvia.
Éste,
como mil, es otro relato más de catorce palabras de amor y ochenta melancólicas,
otro pañuelo más de lágrimas donde te escribo. Otro texto más, otra excusa para
encontrarme contigo.
jueves, 20 de noviembre de 2014
Un trozo de tu piel
No conozco
más destino
que halagarte
Qué daría
yo por un trozo
de tu piel.
Amiga mía
de dulces placeres;
eres viento, fuego,
y tierra;
un torbellino.
Doy ocho besos
y ni uno más
para dejarme
morir contigo.
domingo, 5 de octubre de 2014
El no aniversario
Hoy
es nuestro no aniversario. Soñaré que te llevo al restaurante más
caro de la ciudad. Ya he reservado mesa a las tres de la madrugada
cuando el sueño es más profundo.
Pero
antes quiero pasar toda la tarde contigo. Pasaré a imaginarte a eso
de las cinco. Pestañearé y estaremos en el parque. Entonces supongo
que buscaremos un sitio tranquilo y nos tumbaremos sobre la hierba.
Haré aparecer un árbol y bajo su sombra miraremos las nubes
caprichosas de un día perfecto. Después tomaremos un helado. Los
que venden en el parque sólo son de fresa, chocolate, y vainilla;
pero siempre puedo hacer que tengan también el de caramelo, tu
favorito.
Por
la noche te pondrás ese vestido verde tan bonito que nunca pude
regalarte y sentiré lo que he sentido tantas veces cuando sueño que
te tomo de la mano.
La
noche de nuestro no aniversario quiero que sea perfecta. Quiero
soñarlo a lo grande y estar contigo desde que cierre los ojos hasta
que los abra.
Suscribirse a:
Entradas
(
Atom
)