Un poco de poesía
para este mundo
de plástico,
para tanto acero
y tanto infeliz,
y sonrisas vacías.
Poesías que rellenen
los huecos de los
edulcorantes falsos.
Poesía contra
la polución y
las prisas.
Poesía para
salvarnos del
mundo.
Las manzanas
de fibra ya no
son verdes.
Ahora todo
sabe a cartón.
¡Qué será de
nosotros en este
mundo de plástico,
si no te escribo,
si no te añoro,
si no me abrazas,
si no te pienso,
si no nos amamos!